Psicólogo en Granollers (Col. 24842)

Superar la indefensión aprendida

5 Estrategias para Superar la Indefensión Aprendida

Cuando experimentamos el fracaso de forma repetida, podemos volvernos pasivos y perder nuestra confianza. Para superar esta condición, es importante que trabajemos en el cambio de percepciones de lo que significa un peligro real, la capacidad de asumir responsabilidades, el poder establecer metas realistas y premiarnos por los logros por sencillos que sean. Te lo cuento mejor en el artículo...

La indefensión aprendida es la condición de un ser humano o de un animal que ha aprendido a responder de forma pasiva en situaciones que le afectan negativamente.

El individuo sé queda sin hacer nada, aunque tenga la oportunidad de evitar esa situación.

En personas que sienten que tienen la autoestima baja o que confíen poco en ellos mismos, es muy probable que se de esta condición de Indefensión Aprendida, aunque, según mi opinión, no sea esta la causa de esa baja autoestima.

Para mejorar la autoestima siempre será necesario superar la indefensión aprendida porque, gracias a ello, el organismo es capaz de desbloquearse y de seguir hacia adelante.

Una persona que se siente estancada no puede tener una buena autoestima, no solo porque deje de obtener triunfos en la vida, sino porque desde el estancamiento uno es incapaz de darse cuenta del valor real que tiene como persona.

Este artículo va de presentarte estrategias para superar la indefensión aprendida y así volver a poner en marcha el motor de desarrollo de ti mismo como persona.

¿Cómo se genera la indefensión aprendida en el ser humano?

Para lograr superar la indefensión aprendida y desbloquear la fuerza que nos impulsa a desarrollarnos plenamente es necesario ver qué aspectos de la persona alimentan y dan fuerza a esa condición de indefensión:

En el entorno de la psicología, este concepto de la indefensión aprendida apunta directamente al comportamiento o la conducta de la persona. Para superar la indefensión aprendida, hay profesionales que tratarán de poner el foco únicamente en conseguir cambios en la conducta: “Si te quedas paralizado, muévete”.

Esto en algunos casos funcionará, pero en la mayoría, lo único que generará es más estrés al sistema.

Esto es así porque, por debajo del comportamiento generado por la indefensión, existen emociones y sentimientos paralizantes asociados a experiencias del pasado donde, en esos casos, la persona sí que intentó salir de situaciones desagradables, pero no pudo (porque fueron situaciones demasiado impactantes o porque hubo otras personas que se lo impidieron).

Para no alargar demasiado este artículo, te dejo por aquí otro artículo de mi blog donde hablo más extendidamente de qué experiencias suele vivir la persona en su pasado (normalmente lejano) para acabar aprendiendo que no tiene escapatoria y que más vale no hacer nada.

¿Cómo se relaciona la indefensión aprendida con la baja autoestima?

Ya te he explicado que, en la mayoría de los casos, superar la indefensión aprendida no es solo un cambio de actitud y, dicho sea de paso, si lo enfocamos de este modo es muy fácil generar sentimientos de culpa y de poca valía en la persona que se siente así.

Pero no nos podemos quedar aquí, sintiendo que como he vivido experiencias “X” en el pasado ya no hay nada que hacer y me toca sufrir en el presente.

Un poco más arriba te he comentado que se hace necesario superar la indefensión aprendida para conseguir una autoestima más sana y acorde con cómo es la persona en realidad.

¿Qué relación tiene la indefensión aprendida con la autoestima?

La “retroflexión” de la rabia

¿Esta palabreja qué es?

Hace referencia a la incapacidad de mostrar rabia hacia otras personas y acabar impactándola en nosotros mismos.

¿Te pasa a menudo esto de que alguien te falta el respeto y en ese momento eres incapaz de pararle los pies, y cuando estás solo empiezas a machacarte por no haber podido?

Esto es impactar la rabia en ti mismo en lugar de mostrarla hacia la otra persona. Aquí no estoy diciendo que tratemos de apalear a cualquiera que nos falte el respeto, pero tampoco es justo dirigir esa rabia hacia ti mismo.

Hay muchas formas de retroflexionar de la rabia: la rigidez con uno mismo, los auto insultos, probablemente cualquier tipo de desorden alimentario que implique privación de alimentos o la purga, etc.

Todo esto destruye la autoestima y se relaciona con la indefensión aprendida porque, sin duda, hubo un tiempo en donde sí que expresaste esa rabia, pero pasó algo amenazante al otro lado que te hizo pensar que este tipo de expresiones te ponían en un estado de mucho peligro e inseguridad.

superar la indefensión aprendida

Funcionar por debajo de tu potencial genera mucha frustración

 Es necesario superar la indefensión aprendida para desbloquear tu potencial real. Esta condición de indefensión se manifiesta por la incapacidad de hacer frente, no solo a amenazas, sino también a retos saludables que la vida te va poniendo.

Vivir frenado genera mucha frustración y afecta mucho a la autoestima, no porque el valor que te das a ti mismo se fundamente en esos retos obtenidos; sino porque esos frenos te dificultan para darte cuenta de quién eres en realidad y aceptarte desde ahí.

Construir una autoestima únicamente a partir de triunfos no es sano y genera un gasto energético innecesario, pero vivir sin saborear triunfos y con la idea errónea de que no puedes hacerle frente a nada, tampoco es sano y no está acorde con tu realidad.

La indefensión aprendida te impide darte cuenta de quién eres en realidad

Este punto ya lo he repetido varias veces, pero como considero que es el aspecto más importante que relaciona la indefensión con baja autoestima le quiero dedicar un apartado de forma exclusiva.

Si entendemos que la indefensión aprendida hace referencia a una creencia distorsionada que la persona tiene de sí misma (creer que uno es incapaz de hacer frente a problemáticas, cuando existe un potencial real para poder hacerlo), puedes darte cuenta de que desde esta perspectiva no creo que seas del todo consciente de quién eres en realidad y de cuál es tu potencial.

Sería algo así como si estuvieses viviendo, siendo otra persona: Una persona que siente que no es posible salir de situaciones que le incomodan.

Pero este, sin duda, no eres tú. Tú, como adulto, dispones de una capacidad natural para reaccionar si hay algo que te molesta de tu día a día.

No te estoy diciendo que a partir de ahora vivas siendo “Juan sin miedo”. Sin duda, hay situaciones que implican una amenaza real, por muy adultos que seamos, y que nos pueden poner en un serio compromiso.

Date cuenta de cómo puede afectar a tu autoestima el vivir no siendo tú.

Según mi opinión profesional, intentar aparentar más de lo que somos no ayuda a construir una buena autoestima… igual que vivir aparentando menos.

Estrategias para superar la indefensión aprendida

Quiero compartir contigo algunas estrategias para que puedas ir trabajando poco a poco con el objetivo de superar la indefensión aprendida.

Son estrategias sencillas, pero también son efectivas. Voy a tratar de no caer en el simplismo diciéndote obviedades como: “para superar la indefensión aprendida tienes que aumentar tu autoestima”. Para decir esto, es mejor no decir nada.

Allá voy:

Busca datos de realidad que pongan en duda tu condición de indefensión.

Es decir, busca ejemplos reales donde hayas podido hacer frente a situaciones que te incomodaban o que no te gustaban. Esto son datos de realidad.

Intenta ir a lo simple. Muchas veces estamos totalmente enfocados en lo que no podemos hacer, que pasamos por alto lo que sí que podemos, porque nos parece obvio o sencillo.

Esto, si lo trasladamos al entorno deportivo lo podemos ver más claro: Probablemente veremos algo ridículo si una persona totalmente sedentaria se frustra porque es incapaz de hacer una carrera de 10 km, pero a lo mejor sí que es capaz de ir a caminar a paso ligero durante 15 minutos. Este es un dato de realidad de que su sedentarismo está empezando a cambiar.

superar la indefensión aprendida

Observa las cosas simples y obvias de la forma que tienes de comportarte que pongan en duda de que eres incapaz de defenderte o de reaccionar en contra de lo que no te gusta.

Trata de conseguir actos de triunfo con personas que te ofrezcan seguridad

Esto es algo parecido a lo anterior per más enfocado a la relación con los demás e instándote a forzar un poquito la máquina (solo un poquito).

Si en el apartado anterior te comentaba que observases las acciones fortuitas que ponen en duda a indefensión que sientes, aquí te comento que trates de actuar de forma un tanto proactiva y asertiva con personas que sabes que no van a reaccionar de forma agresiva si les comentas que algo de su forma de actuar en relación contigo no te ha gustado.

Si no conoces ninguna persona que reúna esas características, puedes buscar la ayuda de un profesional de la psicología que sí sea capaz de ofrecértelo de forma real y congruente.

Descubre el origen de la condición de indefensión aprendida que sientes en este momento.

En este apartado quiero dirigirte a un recurso gratuito que tengo, que te ayudará a darte cuenta de qué patrones emocionales y mentales molestos, se han ido repitiendo a lo largo del tiempo a partir de las primeras experiencias de las que tienes memoria.

A lo mejor no podrás saber con detalle lo que pasó en el origen que ha hecho que te comportes de este modo, pero seguro que si que tendrás una idea de con qué se relaciona (con qué emociones, con qué creencias y con qué situaciones se manifiesta).

Para descargarte este recurso gratis, pon tu nombre e email y dale al botón de «recibe tu regalo».

Si te sientes débil y vulnerable desde hace tiempo, con esta guía empezarás a entender de dónde vienen estos sentimientos.

mejorar tu autoestima

Practica la autoindulgencia.

Me encantan las palabrejas indescifrables 😊.

Aquí lo que te comento es que trates de no ser demasiado severo contigo mismo si te das cuenta de que no has podido hacerle frente a algo que te molesta.

Para superar la indefensión aprendida y vivir con una autoestima más sana y natural, esto es tremendamente importante.

El proceso que tienes por delante es el de descubrir quién eres en realidad, el de contactar con esa persona que eres que es capaz de vivir responsabilizándose de su presente y de realizar cambios en su futuro. Para andar por este camino y llegar hasta el final, no puedes ir dándote latigazos a ti mismo. Es un camino de cooperación contigo, más que de imposición.

Prémiate cuando hayas sido capaz de superar la indefensión aprendida en algún momento concreto.

Si en algún momento has sido capaz de parar esta dinámica de indefensión y has logrado hacer algo, por pequeño que sea, que te ha ayudado a salir de ella, hazte saber a ti mismo el logro que has conseguido dándote un premio.

Parar la inercia de comportamientos que llevan mucho tiempo repitiéndose, no es fácil, aunque haya gente de tu círculo que te empuje a cambiar. Conlleva mucho esfuerzo y es totalmente lícito y saludable que te premies cuando consigas tus pequeños y grandes logros.

¡No te cortes!

Conclusiones

Superar la indefensión aprendida es vital en un adulto.

Los niños pueden sentirse indefensos en multitud de situaciones y pueden verse incapaces de salir de estas por ellos mismos. Esto es absolutamente normal; para eso estamos los adultos, para ayudarles en estos momentos.

No es natural que un adulto se sienta derrotado ante situaciones de su vida diaria que implican una molestia o una dificultad. Por definición, el adulto tiene recursos para salir de estas situaciones o tiene la capacidad de buscarlos si no los tiene.

Las personas que han aprendido a lo largo de sus vidas que no hay escapatoria, que hagan lo que hagan no van a ser capaces de superar este tipo de situaciones, tienen por delante el reto de romper esos aprendizajes limitantes.

Te deseo que logres romper esas ataduras y consigas desplegar todo tu potencial como persona.

Si este artículo te ha llegado, si habla de cosas reales que te pasan a ti o a alguien que conozcas, te querría pedir el pequeño favor de difundirlo por tus redes sociales.

La idea es que nadie se quede creyendo que esos aprendizajes del pasado son ciertos. Todos podemos ser capaces de superar la indefensión aprendida.

Así que, por favor, comparte si te ha servido. Gracias.

No sé si mis dos hemisferios cerebrales están en sintonía o se tiran de los pelos: por un lado me interesa la información científica sobre el comportamiento humano y por el otro también me fascina hablar de espiritualidad y de los tránsitos que realiza el alma durante toda su existencia. Espero que el contenido que publico como poco no te deje indiferente. 

Descárgate AQUÍ mi Guia Gratuita con un ejercicio para empezar a entender el origen de tus sentimientos de inseguridad y frustración.

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Si te sientes débil y vulnerable desde hace tiempo, con esta guía empezarás a superar estos sentimientos.

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